Informe USS: Precios de los alimentos registran un aumento del 8% anual 

Desde enero que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de los alimentos venía con una baja sostenida que se detuvo durante octubre, acumulando un alza anual de 8%, superior al 5% del IPC general. Así lo determinó el Informe de precio de alimentos y seguridad alimentaria, elaborado por la USS. 

Tras alcanzar un alza acumulada de 23,9% anual en enero de este año, los precios de los alimentos habían venido mostrando una baja sostenida en el tiempo, la que se vio frenada en octubre, cuando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de alimentos registró un alza de un 0,9%, elevando la inflación a un 8% en 12 meses. 

Esta cifra, superior al IPC general que llegó al 5% acumulado, se suma a los resultados entregados por la Encuesta de Presupuestos Familiares, que mostró que los hogares gastan en promedio un 21,2% de sus ingresos en alimentos y bebidas no alcohólicas. Esta cifra se agrava al ver la diferencia entre quintiles: el de mayores ingresos gasta un 13% en este ítem, mientras que el quintil más pobre destina un 32%. 

Para María Emilia Undurraga, decana de la Facultad de Ciencias de la Naturaleza de la Universidad San Sebastián y ex ministra de Agricultura, “a pesar de la baja en el IPC general, el de los alimentos muestra una pequeña alza que preocupa”. En esa línea, asegura que “el seguimiento al precio de los alimentos para los consumidores es relevante para tomar medidas en cuanto a la producción y desarrollo de políticas que puedan apoyar el acceso a alimentos saludables”. 

Es por esto que desde la USS han elaborado el “Informe de precio de alimentos y seguridad alimentaria”, que busca analizar los datos del escenario nacional e internacional de la inflación de los alimentos, la proporción de gasto de los consumidores en ellos y su evolución durante este año. 

Así, entre los datos entregados por el último IPC, destaca el alza anual de un 111,6% en el precio de las papas explicado, entre otros factores, por la menor oferta por el aumento del precio de los fertilizantes durante la temporada pasada, el aumento en la demanda y la afectación por las condiciones climáticas. 

En el informe de la USS se muestran también los resultados entregados por la CASEN en materia de seguridad alimentaria, donde destaca que un 43,3% de la población chilena mencionó comer menos de lo que pensaba por falta de dinero, y un 36% se preocupó por no tener suficientes alimentos debido a la misma razón. 

El informe concluye que la seguridad alimentaria es un desafío vigente en nuestro país, agravado por la creciente inflación de los precios de los alimentos, resaltando la importancia de abordar esta problemática de manera integral y urgente debido a la combinación de factores económicos, climáticos y sociales. 

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