Instituto de Estudios para la Familia conmemora el Día del niño por nacer y la adopción
Con motivo de la conmemoración del Dia del niño por nacer y la adopción, el Instituto de Estudios para la Familia de la USS realizó el encuentro “Adopción: Testimonio de vida”.
Como recordó el director del Instituto de Estudios para la Familia de la USS, Mauricio Echeverría, en sus palabras de apertura a esta actividad, este año se cumple una década desde que Chile promulgó la ley que fija esta celebración, uniéndose a países como El Salvador, Argentina, Guatemala y Filipinas.
“El nombre de este día plasma una feliz conexión: el niño por nacer y el niño por adoptar. Todos los niños tienen derecho a pertenecer a una familia, sea con padres biológicos o adoptivos. Todo niño que está por nacer tiene derecho a ser acogido en una familia”, dijo.
El Instituto de Estudios para la Familia quiso centrar la atención en la experiencia y en el proceso de adopción a través de este encuentro en el que participaron María Vinka Moyano, directora de la carrera de Trabajo Social de la sede Santiago y experta en materia de adopción; y Hugo Mallea y Natalia Villalobos, un matrimonio residente en Talca, padres de Mateo y Martina, quienes entregaron su testimonio de vida en este ámbito.
El objetivo de la adopción, como explicó María Vinka Moyano, es buscar la mejor familia para un niño. “El proceso está orientado a velar por el mayor bienestar integral del niño, niña o adolescente que, por diversas circunstancias, ha visto vulnerado su derecho a vivir en un entorno familiar. Existen programas específicos de acompañamiento a mamás que están en conflicto con la maternidad y van a dar su hijo en adopción. Lo que ellas están tratando de hacer es resguardar la vida, de la mejor manera posible, de ese niño que está en gestación. Aquí hay una opción por el derecho de vivir de ese niño o esa niña”.
Por su parte, Hugo y Natalia relataron su experiencia, sus motivaciones y los desafíos a los que se enfrentaron antes, durante y después de los procesos de adopción de Mateo y Martina. Para este matrimonio, “sus niños nacieron de otras personas, pero nacieron para ser hijos suyos”.
La subdirectora del Instituto de Estudios para la Familia y moderadora del encuentro, Maite Cereceda, recomendó a las personas con embarazos en conflicto “informarse, no tomar decisiones apuradas, porque hay mucha gente dedicada a esto con toda su energía, todo su tiempo, que se ha preparado para acompañar, para cuidar a los niños que nadie más puede cuidar; para acompañar a las mamás que necesitan vivir en algún lugar durante el embarazo. Hay todo un proceso preparado para cuidarlos a todos. Hay personas dedicadas a esto, que están esperando que los llamen”.
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