El nuevo campo laboral del químico farmacéutico
La Ley de Medicamentos, la exigencia de los estudios de bioequivalencia para los fármacos genéricos que se comercializan en el mercado o la creación del Fondo Nacional de Medicamentos, que financia los remedios de alto costo que no son cubiertos por los seguros de salud, asoman como grandes oportunidades laborales.
Un año y dos meses tiene de existencia la primera farmacia comunal inaugurada en el país en la comuna de Recoleta, iniciativa inédita en Chile, y que ha sido replicada en más de 50 municipios del país. Los recintos, permiten que vecinos de esas comunas puedan acceder a medicamentos más económicos, “de hasta un 70% más barato”, según aseguran sus alcaldes.
En esta implementación voluntaria de farmacias comunales, que crece todos los meses a lo largo del país, se requiere de la presencia del químico farmacéutico. Pero no sólo en este campo. En los últimos años se ha abierto un nuevo campo laboral para estos profesionales a través de la Ley de Medicamentos, la exigencia de los estudios de bioequivalencia para los fármacos genéricos que se comercializan en el mercado o la creación del Fondo Nacional de Medicamentos (más conocido como Ricarte Soto) que financia los remedios de alto costo que no son cubiertos por los seguros de salud.
Temas que están incorporados en la malla curricular de los egresados de la Universidad San Sebastián. La carrera de Química y Farmacia cuenta con una acreditación de seis años, posicionándola como una de las mejores a nivel nacional, con un perfil de egreso acorde a las necesidades actuales del país, orientado principalmente al área clínica asistencial formado por un equipo académico de primer nivel.
Según explica la directora de la carrera, Marcela Pezzani, “los químicos farmacéuticos se pueden desempeñar en diferentes áreas, siendo las más importantes la farmacia comunitaria, la farmacia asistencial en hospitales y clínicas privadas, atención primaria, laboratorio clínico, la industria farmacéutica, la industria cosmética, marketing y regulación del mercado farmacéutico, entre otras”.
Además, el egresado de la USS es un profesional de la salud especialista en medicamentos y otras sustancias biológicamente activas, con particular énfasis en las ciencias farmacéuticas y que asume un rol protagónico en el equipo de salud.
Fortalezas de la carrera
Según explica Pezzani, los docentes que ahí trabajan “son de primer nivel; son profesionales con amplia experiencia en sus áreas de acción, muchos cuentan con estudios de magister y doctorado”.
Destaca que la carrera se caracteriza por la preparación integral de sus estudiantes, basado en resultados de aprendizaje y valores humanos. Nos caracterizamos por la excelencia académica de nuestros docentes, una moderna infraestructura y el acompañamiento y apoyo permanente a nuestros estudiantes durante toda la carrera”.
Respecto a la empleabilidad de los egresados, Pezzani explica que el sector farmacéutico se enfrenta a un momento de adaptación a las actuales condiciones del entorno y a las exigencias de los usuarios: “las nuevas políticas en salud, muestran la necesidad de tener un profesional que oriente al uso racional de los medicamentos, que garantice la respuesta terapéutica y el acceso a tratamientos con productos de calidad. Lo anterior nos lleva a una empleabilidad del profesional químico farmacéutico es cercana al 100%”, acota.
En este punto, la directora de carrera puntualiza que sus estudiantes realizan prácticas e internados profesionales desde tercer año en instituciones de salud de primer nivel, muchas de ellas acreditadas por el Ministerio de Salud. Además existen convenios con las principales cadenas de farmacias comunitarias e industrias farmacéuticas y cosméticas.