También solicitan evaluar la restricción vehicular e incorporar la calefacción distrital en el sur del país.
Para enfrentar el problema de la contaminación del aire, tema que preocupa al 38% de los chilenos, según la Tercera Encuesta Nacional del Ministerio de Medio Ambiente, expertos proponen medir el material particulado fino (PM1), aplicar la restricción vehicular e incorporar la calefacción distrital o de barrio.
Las propuestas las formularon en el Coloquio “Alerta por Contaminación Ambiental” organizado por la Facultad de Ciencia y el Instituto de Políticas Públicas en Salud, IPSUSS, de la Universidad San Sebastián, donde participaron como panelistas la ex ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez; el presidente del Departamento de Medio Ambiente del Colegio Médico, Andrei Tchernitchin; y la académica de la Facultad de Ciencia de la USS, Pamela Cámpora.
Según la ex ministra de Medio Ambiente “esto ya es una tendencia en algunos países europeos y es necesario seguir una estrategia a largo plazo para estos contaminantes más pequeños que llegan a la parte más baja de los pulmones y al sistema respiratorio y causan graves daños a la salud”.
Al respecto, el médico Andrei Tchernitchin, señaló que “como política pública se debería incluir el material particulado ultrafino. Hay varios estudios que muestran que muchas enfermedades del sistema nervioso central serían provocadas por el material particulado ultrafino e incluso podría ser una de las muchas causas del Alzheimer”.
Por su parte, Pamela Cámpora indicó que “avanzar hacia una norma del material particulado ultra fino (PM1) es un desafío bastante grande, porque implicará tener más episodios de alerta y preemergencia, pero también constituye una señal de que estamos contribuyendo a mejorar la calidad de vida de las personas, al disminuir la cantidad de material particulado que efectivamente es el respirable, que pasa al torrente sanguíneo y daña la salud de la población”.
Para abordar el problema de la contaminación del aire en el sur del país, la ex ministra de Medio Ambiente, indicó que hay que avanzar “hacia una calefacción distrital”. “El 90% de lo que pasa tiene que ver con el uso de leña y por eso hay buscar fórmulas para mejorar la calefacción de los hogares, pero no es un problema de fácil solución considerando que la leña es un recurso de bajo costo. Tenemos que avanzar hacia la calefacción distrital que son sistemas en los que un barrio completo se alimenta de una caldera y la distribución se realiza a través de tuberías hacia las distintas viviendas”.
“Pero eso significa que hay que pensar en la eficiencia térmica de las casas y elevar los estándares de la construcción de viviendas nuevas”, agregó Benítez.
Sobre la restricción vehicular, no hay acuerdo entre los expertos. Andrei Tchernitchin, quien es partidario de que se aplique, sostuvo que “no sólo disminuye la congestión vehicular, sino también la contaminación, porque un motor que trabaja ralentizado contamina más que uno que está a velocidad crucero y es mayor la composición tóxica bajo estas circunstancias”.
Mientras que Pamela Cámpora indicó que “hay que estudiar esta medida y otras como las vías exclusivas o los ejes ambientales en cuanto a su eficacia, porque producen una congestión vehicular en las calles aledañas que es infinitamente mayor”.
Benítez en tanto opinó que tal como está hoy establecida la restricción ambiental, “no discrimina por año del vehículo sino que por número de patente. Si bien aporta a la menor congestión, no podemos saber si se trata de un automóvil nuevo o antiguo o si contamina más o menos”.
Además recalcó que se “genera un trastorno mayor no sólo para las personas que tienen un vehículo sino para todo el mundo, porque si se aplican cuatro dígitos de restricción en forma indiscriminada, colapsa el transporte público y el metro. Al final la medida causa más problemas que los beneficios que produce”, dijo la ex ministra.