¿Alguna vez te quedaste en blanco frente al profesor, o tus compañeros? ¿Sabes si lo que dijiste realmente salió como querías? Para tener una comunicación más efectiva y asegurarte de que tu mensaje llega de manera correcta, es imprescindible conocer sus características básicas y una serie de aspectos a considerar para ser un buen comunicador.
Según explica el fonoaudiólogo Alejandro Rodríguez, director de carrera de Fonoaudiología y del Diplomado de Coaching Comunicativo y Técnica Vocal de la Universidad San Sebastián, se entiende por comunicación “el intercambio de información que se produce de forma intencionada entre dos o más personas”. En ella se reconocen roles de emisor (el que comunica) y receptor (quien recibe la información), los que varían con el desarrollo de las conversaciones; Finalmente, existe un contexto, en el cual se producen los diálogos.
En la puesta en escena de la comunicación intervienen tres componentes: el lenguaje verbal, que es el tipo de lenguaje que usa palabras para interactuar, el no verbal, que cumple el rol de complementar, enfatizar y regular lo que se expresa a través de las palabras con el lenguaje corporal. Y el componente paraverbal, que complementa y nos ayuda a interpretar mejor lo que el lenguaje verbal está diciendo, por ejemplo, a través del tono, el volumen, el ritmo de la voz, etc.
“Curiosamente, el lenguaje verbal es lo que menos aporta a la comunicación. Alrededor de un 7%, mientras que los aspectos no verbales y paraverbales aportan en mayor medida con un 55% y 38% respectivamente”, señala el académico USS.
El fonoaudiólogo entrega una serie de tips para maximizar su efectividad comunicativa:
Siguiendo estos simples consejos, te asegurarás de que te has preparado para entregar la información que quieres con un objetivo determinado, establecer vínculos comunicativos con tus interlocutores entregando tu atención a todos en diversos momentos, verte relajado y con confianza al momento de interactuar con otros.