Claudio Orrego inició ciclo de Encuentros con precandidatos presidenciales

Orrego

La actividad es organizada por los centros de alumnos de Derecho, Ciencias Políticas y Gestión Pública, Ingeniería Comercial y Pedagogía en Historia y Geografía, con apoyo de Vicerrectoría de sede, y forma parte de un ciclo entre los jóvenes y quienes postulan a la presidencia del país.

Javier Vera Jünemann, vicerrector USS Concepción, inició la actividad elogiando la iniciativa, “en especial porque surgió desde los centros de alumnos y de los propios estudiantes. Claudio Orrego es uno de los representantes más dinámicos de la Democracia Cristiana, y su campaña es un referente a nivel nacional”, afirmó.

Precandidato

Orrego Larraín, inspirado por la alta asistencia al encuentro, dio a conocer un poco de su filosofía personal. “Hay dos visiones de la vida: mirar que las cosas pasen, o hacer que las cosas pasen. Hace tiempo trato de hacer lo segundo y en eso estoy ahora”. Para ilustrar esta realidad, habló de sus extensos años trabajando en campamentos, viviendo en una población, mientras era presidente del Centro de Alumnos de la Pontificia Universidad Católica de Chile, “porque la vocación social no se improvisa. Si viví en una población no fue porque quisiera disfrazarme de algo que no era, sino porque, como decidí dedicar mi vida al prójimo, tenía que sentir como él”, contó.

“Mi vocación es el servicio público, es ahí donde me realizo como persona. He sido feliz ejerciendo como concejal y como alcalde de Peñalolén, luego como Ministro de Vivienda. No me gusta el doble estándar, se deben defender los Derechos Humanos de los partidarios y de los adversarios. Quiero ser Presidente de la República, porque quiero terminar con aquello que me molesta”, enfatizó.

Obstáculos de la sociedad actual

El precandidato identificó “nuevas dictaduras”, las encuestas, la falta de alternativas y los promedios. “Estos nos marcan como país. La pobreza es de 14,8 %, el crecimiento de 6,4 %… Pero eso es tiranía. La pobreza en la comuna de Ercilla, de alto componente indígena, es de un 48%. Y sin ir más lejos, el promedio de ingreso per cápita del que nos hablan está lejos de ser el de la mayoría: un 80% está bajo él. Chile es uno de los países con mayor desigualdad social del mundo, y no puede fundamentarse en cifras que no representan a su población”, aseveró.

Enumeró cinco ideas fuerza de su campaña, como la eliminación del lucro del sistema educacional y gratuidad para todos quienes lo necesiten; la eliminación de las isapres, de los “negociados” en salud y la discriminación por sexo y por edad, y la reforma urbana.

Su proyecto presidencial incluye la reforma y/o eliminación del sistema binominal y una reforma tributaria, “tendiente a aumentar los impuestos a los ricos y disminuirlos a la clase media. No queremos más elusiones fiscales, que nadie más pueda llevar dinero a islas del Caribe para evitar pagar impuestos. Gracias a estas ganancias, de unos cinco mil millones de dólares, podremos permitir a las mujeres jefas de hogar obtener subsidios que les permita incorporarse al trabajo con sus problemas solucionados, no más “bonos” de regalo”, expresó Orrego.

Diálogo con la audiencia

Claudio Orrego respondió las preguntas del público en torno a temas como descentralización, salud y educación. En especial la de un alumno que le consultó por qué ahora critica lo que antes avaló, en especial cuando fue ministro de Estado. “Eran otros contextos, otros problemas. Si hoy los profesores ganan mal, antes era irrisorio. La inversión en educación era bajísima. Había una serie de problemas sociales que hoy no están. Formo parte de una Concertación que no obstante igual está centralizada”, admitió Orrego.

Claudio Orrego tiene 46 años, es abogado de la Pontificia Universidad Católica de Chile y máster en Políticas Públicas por la Universidad de Harvard (Estados Unidos). Fue ministro de Estado del presidente Ricardo Lagos y ex alcalde de la comuna de Peñalolén. Es hijo del fallecido académico, investigador, historiador y político DC Claudio Orrego y de Valentina Larraín, secretaria personal del presidente Patricio Aylwin.

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