Beneficios de las semillas para una dieta saludable

En su columna la académica de Nutrición y Dietética de la USS, Carla Guzmán, destacó las ventajas nutricionales de semillas como chía y linaza. 

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Las semillas han adquirido gran popularidad producto de sus características nutricionales como el alto contenido de ácidos grasos, fibra, aminoácidos, antioxidantes y vitaminas, lo que se asocia al buen funcionamiento celular y prevención de enfermedades cardiovasculares.

Entre las semillas más conocidas destaca la chía, importante fuente de ácidos grasos, flavonoides y antioxidantes como quercetina, propiedades que se han asociado a efectos terapéuticos en patologías como aterosclerosis, además de contener fibra que puede ayudar en la regularización del tránsito intestinal y reducción de lípidos sanguíneos.

Por otra parte, la linaza posee un alto contenido de ácido graso omega 3 y fibra, atribuyéndosele propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y efecto laxante. Asimismo, la semilla de zapallo es abundante en fitoesteroles y antioxidantes como tocoferoles y carotenoides, además de ser una buena fuente de ácidos grasos insaturados, fibra y proteínas.

A lo largo de la historia las semillas han sido añadidas a panes, cereales y otros productos de panificación, pero también se pueden agregar a ensaladas de verduras y sopas, aportando mayor variedad de color y sabor, así como en ensaladas de frutas.

Respecto a la forma de consumo, se pueden consumir enteras, en especial aquellas suficientemente grandes como para masticarlas, mientras que las de menor tamaño idealmente deben ser trituradas o remojadas en agua, para aprovechar de mejor manera sus nutrientes y/o evitar que se alojen a nivel digestivo y provoquen algún evento adverso.

Su consumo no se recomienda si existen problemas gastrointestinales, tales como crisis de enfermedad inflamatoria intestinal o eventos diarreicos, ya que pueden agudizar la sintomatología. En el caso de semillas de chía, se han registrado casos de alergia en personas que, eventualmente, también son alérgicas a frutos secos.

Carla Guzmán
Académica de Nutrición y Dietética 

Universidad San Sebastián

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