Desarrollan guía para construir alojamientos de montaña sustentables

La primera etapa del Proyecto Colaborativo de Vinculación con el Medio (VcM) de la Universidad San Sebastián corresponde a una fase de investigación en alojamientos de Farellones. Con lo recopilado se elaborará la guía de recomendaciones dirigida a las Direcciones de Obras Municipales para las etapas de diseño, construcción, operación o renovación de recintos hoteleros.

El sector hotelero tiene una amplia responsabilidad en el impacto del consumo de recursos naturales; desde la etapa de diseño, construcción hasta su operación. “Actualmente, en Chile no se abordan de manera específica los atributos sostenibles de los alojamientos según su tipo de infraestructura, zona climática o región de ubicación”, revela Pablo Ramírez, académico de la Universidad San Sebastián.

En ese contexto, la carrera de Ingeniería en Gestión de Expediciones y Ecoturismo lidera, en colaboración con la Escuela de Arquitectura, el Proyecto Colaborativo de Vinculación con el Medio (VcM) Elaboración de acciones de buenas prácticas constructivas sustentables para alojamientos de montaña, que identifiquen e incorporen acciones en su materialidad que puedan ser utilizadas por Direcciones de Obras Municipales u otras instituciones de índole nacional. Caso Pueblo de Farellones.

Buenas prácticas para alojamientos

El objetivo de esta iniciativa, que tributa al Programa Territorial Hito Más Turismo Sostenible, de VcM, es identificar diversas acciones de buenas prácticas de sostenibilidad, desde el ámbito de la construcción. A esto se suman recomendaciones dirigidas a las Direcciones de Obras Municipales (DOM) para las etapas de diseño, construcción, operación o renovación de recintos hoteleros.

“Es un estudio inédito en nuestro país. Con este proyecto estamos contribuyendo a lograr un mejor estándar de calidad de alojamiento turístico, donde los viajeros que suban a la montaña (esquiadores, turistas aventura o ecoturistas) puedan tener un servicio de calidad y en un alojamiento que sea eficiente en términos ecológicos”, afirma Ramírez.

El proyecto cuenta además con la colaboración del Programa Andes Santiago y la Corporación de Adelanto de Farellones.

Farellones: epicentro del turismo nevado

La primera etapa, que se inició en abril, corresponde a una fase de investigación, programada hasta fines de noviembre de este año. Alrededor de 50 estudiantes de ambas carreras, en conjunto con académicos USS, se encuentran estudiando en terreno diversos alojamientos turísticos de Farellones, en la Región Metropolitana.

Javiera Salazar, académica de la Escuela de Arquitectura, explica que parte de la investigación se centra en “determinar las brechas de sostenibilidad arquitectónica, para lo cual los estudiantes levantarán información de atributos sostenibles e indicadores y, así, posteriormente elaborar este manual de buenas prácticas de construcción sustentable para alojamientos de turismo de montaña”.

De acuerdo con Salazar, “la investigación, sumada a un trabajo en terreno, les permitirá a los alumnos analizar, comprender y proponer soluciones constructivas sostenibles e innovadoras que aporten directamente a la comunidad y construcciones de nuestro país”.

Para Pablo Ramírez, desde la vereda del turismo y ecoturismo, “esta investigación permitirá que los futuros gestores, administradores y colaboradores de hoteles no solo se aboquen a la gestión, sino que también a la construcción y planificación, colaborando con la sustentabilidad del destino”.

¿Qué hace sustentable a una construcción?

Los académicos a cargo del proyecto analizan que, si bien se han levantado normativas nacionales e internacionales (europeas y estadounidenses principalmente), aún no existe una medida específica que aborde los alojamientos en montaña. Desde esa arista, la construcción sustentable de un alojamiento de montaña debería considerar las siguientes variables, las cuales se están poniendo a prueba en este proyecto:

  • Diseño del hospedaje: materialidad de la techumbre; color (tonos nobles, no exagerados); altura (mientras más alto, más espacio para la decoración y, en general, más luz y ventilación natural); acceso a iluminación natural que permite mayor eficiencia energética (influido por la orientación); tipo calefacción y aislación; uso de energías renovables; y educación ambiental a los huéspedes, a través de señaléticas o capacitaciones.
  • Gestión del agua: uso artefactos eficientes; tratamiento de agua o reutilización de aguas lluvia; utilización de materiales de la zona; presencia de contenidos reciclados.
  • Gestión de residuos: si se realiza reciclaje; existe un espacio determinado para ello; nivel de reciclaje, entre otras variables.
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