La ex senadora y ex ministra de Estado intervino también en la primera sesión del “Ciclo de Humanismo Cristiano” que la Escuela de Liderazgo desarrolla en la U. San Sebastián.
La Escuela de Liderazgo de la U. San Sebastián Concepción inició, con Soledad Alvear Valenzuela como invitada, su ciclo de charlas “Pensando Chile, Presidenciales 2017”, un masivo encuentro desarrollado en el Auditorio Marta Montory del Campus Las Tres Pascualas. La reunión contó con la presencia de autoridades comunales, José Miguel Ortiz, diputado de la República; Álvaro Ortiz, alcalde comunal, y representantes de la institución sebastiana.
En su presentación, Sergio Castro, vicerrector de la USS Concepción, contextualizó el ciclo, cuyo objetivo “es honrar nuestros principios como una universidad inspirada en el humanismo cristiano y contribuir al debate de ideas para potenciar la formación integral de nuestros estudiantes y aportar a la comunidad”. Indicó que en la universidad, como tal, tiene cabida la discusión de todas las ideas.
Luego Cristian Puentes, director de la Escuela de Liderazgo de USS Concepción, planteó que esta actividad se inserta “en el espíritu cívico y republicano con que estamos, desde la Universidad San Sebastián, pensando Chile. Tenemos mucho que contribuir”. Informó que el ciclo se extenderá el segundo semestre con los candidatos presidenciales que participarán en la primera vuelta.
Exposición de Alvear
La ex senadora, ex ministra de Estado y ex canciller (primera mujer en ostentar este cargo) planteó que uno de los desafíos del próximo gobierno es enfrentar la desaceleración de la economía con una mirada inclusiva y humana.
Esta tarea se debe afrontar asumiendo que “queremos que el país crezca más, pero ese desarrollo debe ser inclusivo, sostenible, solidario e integral”. Agregó que todas las políticas públicas deben estar centradas en la persona humana y en su dignidad. “No todo lo soluciona el Estado ni el mercado, debemos fortalecer las comunidades, la primera de ellas, la familia, también las juntas de vecinos, los clubes de adultos mayores, los grupos juveniles y otros”, dijo.
Enfatizó que el gobierno se debe preocupar de los pobres y a la vez de los débiles. “Debemos preocuparnos de los niños que están en el Sename, pero también de los niños de grupos vulnerables, de las mujeres jefas de hogar, de los adultos mayores, preocuparnos de la soledad en que viven muchos adultos mayores a lo largo de Chile”, expresó.
En cuanto al desarrollo inclusivo, éste “no sólo debe buscar la productividad sino también la felicidad de los seres humanos”. Así también se refirió a la necesidad de aumentar los niveles de colaboración y de recuperar la confianza y credibilidad en todas las instituciones del país.
La abogada, egresada de la Universidad de Chile con el Premio Universidad (año 1972) indicó que se debe tener “un compromiso con la racionalidad, no todo se va a solucionar en cuatro años, eso es imposible. Hay que tener responsabilidad y no caer en populismos, ser valiente y decir que no todo se puede lograr en un período”. En ese sentido, planteó que un “desafío mayor es superar la trampa de los países de ingresos medios, como lo ha dicho y escrito tantas veces Alejandro Foxley. Una trampa en que el país puede dar un salto al desarrollo o caer”.
Añadió que debemos mirar el país con prospectiva, ver cuáles serán los desafíos en el futuro, por ejemplo, planteó que para los próximos años uno de los desafíos en el mundo será el uso del agua. “Debemos tener una senda, no quedarnos en la mirada chica, coyuntural. Los países que lo han hecho, como Singapur, han logrado avanzar”, puntualizó.
Humanismo Cristiano
Previo a la conferencia, Soledad Alvear intervino en el Ciclo de Humanismo Cristiano con la presentación “¿Qué implica ser un Humanista Cristiano en Política hoy?”, dirigida a estudiantes y académicos de la USS y desarrollado en el Auditorio Gladys Matus del Campus Las Tres Pascualas.
Tras la intervención de Eugenio Yáñez, director de Formación y Desarrollo Académico de la USS, Alvear expuso a los asistentes (directores de carrera, profesores, estudiantes, funcionarios y otros invitados) que hoy “vivimos una crisis del hombre, de la política, del pensamiento cristiano. Vemos tantos casos de corrupción en el mundo, en Chile, que dudamos si se trata de casos aislados o bien el ejercicio de la política misma se asocia a esa corrupción. Esto es lo que más nos duele. Debemos generar un cambio de actitud y volver a ser el país republicano austero que Chile fue y que nuestros padres y abuelos conocieron”, manifestó.
Analizando el Humanismo Cristiano desde la base de los planteamientos de Jacques Maritain, Alvear analizó cuatro grandes rasgos que, a su juicio, el Humanismo Cristiano debiese imponer, como principios, a la sociedad: opción preferencial por los pobres, los débiles, los que se encuentran en riesgo; promoción y fortalecimiento de vínculos entre personas, “cara a cara, en juntas de vecinos, en sindicatos, en voluntariados, en aquello que me hace sentirme parte de”; defensa de la virtud y una mirada a la vida buena, “con estilos de vida dignos de ser promovidos y otros, desincentivados; con una vida pareja, de moral pública y de moral privada”, y un aporte del Humanismo Cristiano a la política.
Con respecto de este último punto, afirmó que “sabemos que la naturaleza impone límites, es frágil, y que hay límites humanos que no pueden ser sobrepasados. Al contrario, deben ser resguardados por la política. Y esto tiene mucho alcance: falsas promesas, respuestas simples sin ningún respaldo para ganarme un cupo en. No es fácil hacer prevalecer valores del Humanismo Cristiano en política, pero es fundamental”, manifestó.
La ex ministra además contó diferentes vivencias personales y relacionadas con su quehacer político, e instó a los alumnos a acercarse a la política. “Necesitamos de personas buenas, rectas, que contribuyan a crear un mundo más probo”, puntualizó.