Michael Millán es titulado de la carrera de Odontología en la Universidad San Sebastián. Durante su trayectoria como estudiante, participó de diversas instancias de impacto territorial, pero una intervención realizada en la comuna de Coihueco, donde le correspondió atender pacientes de diversas edades, marcó su experiencia universitaria.
Ese trabajo despertó en él una profunda vocación por el servicio público, que hoy, gracias a la Universidad que lo formó, podrá continuar desarrollando y desplegando junto a las comunidades.
Michael será uno de los diez primeros protagonistas del Programa Misión ChileUSS, una innovadora iniciativa de la Dirección General de Empleabilidad y Egresados de la Universidad San Sebastián, que asume el compromiso de generar un impacto transformador en zonas de rezago del país. Para materializar esta tarea, inserta a un grupo de profesionales en el territorio para realizar acciones que permitan contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas y promuevan el desarrollo sostenible.
¿De qué se trata? Misión ChileUSS es la hoja de ruta que convoca y guía el desarrollo de proyectos asociados que se desplegarán en diferentes territorios en condiciones de vulnerabilidad, para lo cual fomenta la vinculación con organismos públicos y privados a fin de atender necesidades de servicios fundamentales, en una población que no tiene acceso permanente a estos, estableciendo un puente virtuoso con otros actores, lo que, de paso, abre nuevas oportunidades laborales a los egresados de la Universidad.
Millán señala que se incorporó al Programa porque se trata “de un trabajo con sentido, que le da un peso más importante a la tarea que uno desarrolla”.
El primero de estos proyectos es Impacto en salud bucal infantil Universidad San Sebastián – Camanchaca, desarrollado en colaboración con esta empresa y la Municipalidad de Talcahuano, cuya actividad inaugural se llevó a cabo en el colegio San Francisco de esa ciudad, donde un equipo compuesto por seis odontólogos, dos nutricionistas y dos trabajadores sociales, además de cuatro asistentes dentales y un equipo administrativo se instalarán durante un mes en un espacio habilitado como clínica dental con equipos de última generación, con una la misión de dar de alta en materia dental a más de 560 niños y niñas de prekínder a octavo básico del establecimiento. La comunidad escolar, además, se verá beneficiada con control y asesoría en temas de nutrición saludable y con acciones de prevención y promoción de la salud oral.
Durante todo el proceso, serán acompañados y asesorados por académicos de la Casa de Estudios, lo que les permitirá hacer intervenciones de mayor complejidad, con toda seguridad para los niños.
En esta experiencia, todos ganan, porque además del impacto comunitario, los jóvenes profesionales tienen la posibilidad de adquirir experiencia laboral y acceder a una oportunidad única de participar de una instancia de transformación personal y profesional, reafirmando el compromiso que la Universidad San Sebastián tiene con las comunidades, especialmente a través del despliegue de las iniciativas de Vinculación con el Medio.
La odontóloga Engiee Ferro cuenta que optó por participar de este Programa porque siempre ha sentido “que la vocación de servicio es uno de los ejes principales para poder ser un aporte en la sociedad, donde se entregue atención de calidad para aquellas personas que se encuentran en lugares donde el acceso a la salud dental se ve dificultado por la conectividad o por lo económico, entre otros factores”.
En los próximos meses, se sumarán a esta iniciativa instituciones de las comunas de Coronel y Tomé, materializando y dando continuidad a este esfuerzo público y privado que busca disminuir las brechas en comunidades con altos índices de pobreza y vulnerabilidad, contribuyendo a la descentralización que existe en muchos de estos territorios.