Alianza entre Universidad San Sebastián y el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) permitió desarrollar una iniciativa que buscó crear conciencia sobre las dificultades a las que se enfrentan día a día las personas en situación de discapacidad con el fin de caminar hacia una sociedad más inclusiva y empática.
Una experiencia educativa diferente fue la que vivieron decenas de jóvenes universitarios y estudiantes de enseñanza media de la Región de Los Lagos. Esto, luego de participar del proyecto HAPTO: Ver y Sentir en Tu Región, iniciativa impulsada por la Universidad San Sebastián y el Centro Cultural Gabriela Mistral.
En efecto, mediante diversas actividades lúdicas se trabajaron valores como la empatía y la solidaridad para entender los desafíos a los que se enfrentan las personas en situación de discapacidad. En esta oportunidad, los participantes –que tenían una excelente capacidad visual- fueron inhabilitados en su sentido de la vista para intentar desenvolverse como una persona ciega o con capacidades visuales reducidas.
“Nuestra idea tiene por objetivo el fomentar la difusión de los derechos de las personas en situación de discapacidad. Es un ejercicio de empatía, de ponerse en el lugar de otro, para que el día de mañana podamos pensar en cómo ir configurando una sociedad más inclusiva”, explicó Kerima Carmi, directora Nacional de Bienestar Estudiantil de la Universidad San Sebastián.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, más de mil millones de personas viven en todo el mundo con alguna forma de discapacidad, es decir, alrededor del 15% de la población mundial. De ellas, casi 200 millones experimentan dificultades considerables en sus actividades de la vida diaria.
Para José Guillermo Leay, vicerrector en la Sede De la Patagonia de la U. San Sebastián, la instancia no sólo sirvió para concientizar a la comunidad estudiantil, sino también promovió valores. “Nosotros estamos comprometidos en que nuestros estudiantes se formen bajo altos estándares de calidad, porque queremos que el día de mañana sean excelentes profesionales. Sin embargo, como universidad también estamos muy comprometidos con su formación valórica, porque queremos que –de igual manera- sean buenas personas, sensibles con el entorno, para el progreso de sus comunidades y el sur de nuestro país”, apuntó.
En la oportunidad, participaron estudiantes de diversas carreras de la misma casa de estudios, además de jóvenes del Colegio Puerto Montt y Colegio Da Vinci School.
Una de las jóvenes que participó en la oportunidad fue Valentina Villegas, quien valoró positivamente la actividad. “Creo que aun falta mucho para hacer de Chile un país inclusivo, pero mediante iniciativas como éstas podemos entender las falencias que tenemos en infraestructura y la visión que tenemos sobre el mismo concepto. Además, nos permite acercarnos a la vida que tiene una persona con discapacidad, fomentando la empatía y otros valores que son importantes para nosotros”, comentó la estudiante de Kinesiología.
Cabe destacar que quienes lideraron la ejecución del proyecto fueron dos personas en situación de discapacidad visual y tres mediadores culturales del GAM quienes a través de diversas actividades permitieron que los jóvenes vivenciaran la discapacidad, experimentando una limitación funcional para luego dar cuenta de sus derechos como personas, generando una reflexión crítica en torno al tema.