¿Cómo promover habilidades socioemocionales?
Frente a los últimos episodios de violencia en establecimientos educacionales, académica USS entrega recomendaciones para promover habilidades socioemocionales que permitan enfrentar estos conflictos en la sociedad.
La convivencia escolar tiene que ver con la posibilidad de integrarse en la vida social y lo que ha ocurrido en las últimas semanas se trata de un evidente desajuste en este proceso.
Así lo expresa, Ximena Rojas, académica de Psicología de la USS, quien plantea que si bien la pandemia ha influido en este contexto, no es la única causa. “Existe un desajuste de participación responsable en los espacios de convivencia común”.
– ¿Qué camino seguir?
Es importante trabajar las habilidades socioemocionales para aprender a vivir en comunidad y aportar como un buen ciudadano en los espacios de convivencia común. Las habilidades socioemocionales están asociadas a las capacidades prosociales que implican poder mentalizar al otro y considerar que tiene intereses, intensiones y necesidades propias, además de distintos niveles de emocionalidad. Por lo tanto, gestionar estas habilidades para la vida en comunidad siempre es una meta social.
– ¿Cuál es el rol de los manuales de convivencia?
Los manuales de convivencia escolar están construidos sobre la base de herramientas teóricas bastante potentes e importantes. Lo relevante es entender que el conflicto es parte de las relaciones humanas y, por lo tanto, no es el problema. Hay que focalizarse en las soluciones para los conflictos que surgen y para eso se deben integrar las habilidades prosociales.
– ¿Cuál es el abordaje con los estudiantes?
Con ellos son importantes todas las herramientas que provienen de los modelos de resolución pacífica de conflictos, donde es fundamental reconocer el conflicto, hacerlo visible y tomar una posición. Considerar los intereses de las partes, pero también manifestar la disposición a ceder para llegar a una solución. Se debe reconocer la igualdad de derechos, oportunidades y facilitar la reparación. Hay que desarrollar en los estudiantes, estrategias que impliquen la incorporación de la empatía, el desarrollo moral, el modelaje.
– ¿Y qué hacer desde los colegios?
Los establecimientos educacionales deben capacitarse en distintas formas de manejo de conflictos. Hay modelos donde se pueden conjugar dimensiones que son básicas en esta materia y se ponen en juego, los intereses personales y la preocupación por el otro. La gestión de ambos ejes da como resultado, distintas maneras de manejar el conflicto: colaborativa, acomodaticia, evitativa, competitiva o de alto compromiso.