Si bien las guerras son eventos de profunda trascendencia e impacto en la vida de las personas y el devenir de las naciones, es fácil caer en la trampa de reducir estas complejas experiencias individuales y colectivas a narrativas simples de confrontación, héroes y victoria. Casi un siglo y medio nos separa de la Guerra del Pacífico, el último conflicto armado internacional que ha marcado la historia de Chile, y hasta el día de hoy continúa atravesando la identidad y memoria de los países involucrados.
Buscando una exploración más profunda y matizada de este episodio de la historia sudamericana, el historiador chileno y académico de la Universidad San Sebastián, Gabriel Cid, junto con la historiadora peruana Carmen McEvoy, publicaron recientemente “La Guerra del Pacífico (1879-1883)”: un libro que, bajo una perspectiva binacional y visión de conjunto, busca trascender los constructos nacionalistas y el relato de campañas militares.
Los contenidos del libro, dice el Dr. Cid, “presentan una imagen de la guerra más compleja, en el sentido de que no se reduce la experiencia bélica a la enumeración de batallas y de tratados diplomáticos. Incluyendo esas dimensiones, en nuestro trabajo apostamos por brindar una perspectiva social y cultural de la guerra, que aborde otros fenómenos como el rol de la opinión pública, la función de la religión, la actividad de la sociedad civil, entre otros. Y al mismo tiempo, que pondere la acción de otros actores, como mujeres, niños, artistas, médicos, etc.”
Publicado como parte de la colección “Historias Mínimas Republicanas” del Instituto de Estudios Peruanos, se trata de una obra dirigida a un público no especializado, con un lenguaje cercano, bien ilustrado y con recuadros informativos, que propone, en la medida de lo posible, una síntesis histórica ecuánime y desmitificadora.
El libro de Gabriel Cid y Carmen McEvoy comienza situando la Guerra del Pacífico en la convergencia entre “lo nuevo y lo viejo”; entre las antiguas rivalidades coloniales y los intereses económicos globales y nacionales de la época. Desde la justificación ideológica de la guerra y las estrategias desplegadas por los ejércitos y armadas, hasta la participación de la sociedad civil y la redefinición de desarrollo durante la posguerra, los autores examinan el conflicto a través de un lente que destaca las similitudes y patrones comunes a todas las guerras: cuestiones profundamente humanas y universales.
La intensidad de la guerra y sus consecuencias continuaron resonando a lo largo de los años, redefiniendo las percepciones e identidades nacionales. Las pérdidas y ganancias territoriales perfilaron una dinámica regional que subsiste en las relaciones diplomáticas hasta nuestros días, reflejado en las disputas llevadas a instancias como la Corte Internacional de La Haya. Pero la guerra no solo dejó cicatrices en el mapa, sino también huellas profundas en la conciencia histórica de Perú, Bolivia y Chile, penetrando en la psicología nacional y en la manera en que las sociedades interpretaron sus propios recorridos históricos.
Así, más que un relato histórico convencional, “La Guerra del Pacífico (1879-1883)” es una exploración que supera los enfoques estrechos para revelar una perspectiva amplia, novedosa y reflexiva. Como dicen los autores, una mirada “menos interesada en alimentar rivalidades nacionales (como lo fue la labor de la historia tradicionalmente) y más atenta a reflexionar comparativamente sobre un fenómeno social, político y cultural tan complejo y dramático como son las guerras”.
Cabe destacar que el libro estuvo entre los más pedidos de la Feria del Libro de Lima, donde fue presentado. A un mes de publicarse ya agotó su primera edición, y se prepara la segunda.