Investigadores proponen enfrentar la crisis del agua desde la gobernanza colaborativa
La Dra. Tatiana Celume, investigadora de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, es parte de un nuevo proyecto Anillo que aborda la crisis hídrica bajo un enfoque interdisciplinar articulando sociología, ciencias jurídicas, antropología y ciencias ambientales.
La escasez hídrica es una de las crisis sociales más graves que atraviesa el país. Si bien se ha convertido en un tema preponderante en el debate público en los últimos años, las organizaciones y comunidades afectadas han levantado la voz al respecto hace al menos dos décadas. Es en este contexto que un grupo de trabajo interuniversitario, colaborativo y multidisciplinario se adjudicó recientemente fondos ANID para conformar un Anillo de investigación que busca hacer frente a este problema desde el derecho y las ciencias sociales, con la perspectiva territorial como eje central.
La iniciativa es dirigida por la Dra. Paola Bolados (Universidad Autónoma de Chile), y participa como Investigadora Principal la Dra. Tatiana Celume, académica de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad San Sebastián, especialista en usos y derechos de aguas. “Entendiendo la problemática no solo como una crisis natural asociada a la sequía, sino también una crisis social multidimensional, el proyecto propone justamente un enfoque interdisciplinario para su estudio que se nutre de la antropología, la sociología y las ciencias jurídicas y ambientales”.
Considerando, además, que el modelo de gobernanza actual del agua ha deteriorado los ecosistemas y la posibilidad de un desarrollo sostenible para los territorios y comunidades del país, el objetivo principal de este Anillo de investigación es proponer, como alternativa, modelos colaborativos de gobernanza del agua. Es decir, un trabajo colectivo que involucre a todos los actores involucrados, rescatando aquellos usos y valoraciones del agua que han sido invisibilizados por el modelo existente.
“Además de su carácter interdisciplinar, lo más trascendental de la investigación que vamos a realizar es que ésta se desarrolla en tres cuencas distintas del país. En particular, tres territorios que han sido impactados por la mega-sequía en la zona centro-sur, que son Aconcagua, Maule y Toltén”, señala la Dra. Celume, precisando que como Investigadora Principal, estará a cargo de la conflictividad que existe en el uso de las aguas en la cuenca del Maule.
Perspectiva territorial
La pregunta central que orienta este proyecto es qué tipo de conflictos sobre los usos y la valoración del agua se manifiestan en los territorios, y qué lecciones se pueden aprender de estos conflictos para el diseño de modelos colaborativos situados en los territorios, entendiendo las cuencas hidrográficas no sólo como espacios geográficos sino también socioculturales, económicos y normativos.
En ese sentido, se propone el concepto de “territorio hidro-social” como la principal unidad de análisis en la cual trabajar experiencias de gobernanza, promoviendo el intercambio de experiencias de colaboración.
Entre las principales actividades que contempla el proyecto se encuentra la generación de publicaciones divulgativas, dirigidas a audiencias amplias, realizadas por activistas y actores de la sociedad civil, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, privados, entre otros. Asimismo, seminarios y talleres en cada territorio, y una plataforma de libre acceso que reunirá toda la información generada por el proyecto.
El proyecto Anillo de investigación “La crisis social del agua: desarrollo de alternativas de gobernanza colaborativa en un contexto de megasequía en la zona centro-sur de Chile” tendrá una duración de tres años. Sus resultados esperan contribuir a entregar las condiciones para la incorporación y reconocimiento de otros usos y comprensiones del agua, actualmente en el centro de la discusión pública.