Sin los cuidados o las recomendaciones profesionales, las personas pueden arriesgarse a sufrir lesiones agudas, traumáticas u otras.
En verano aumentan las actividades al aire libre. Personas de todas las edades se sienten estimuladas a desarrollar ejercicio y práctica deportiva. Muchos no son practicantes habituales ni están familiarizados con el ejercicio físico. Sin los cuidados o las recomendaciones profesionales pueden arriesgarse a sufrir lesiones agudas, traumáticas u otras.
Lo lógico antes de iniciar una práctica deportiva es chequear nuestra salud, verificando las condiciones cardiovasculares o sistémicas. Son muy pocas las entidades patológicas que no se benefician del ejercicio y previenen su progreso o mejoran.
Otro elemento importante es el estado nutricional. Considere su peso corporal como un factor determinante en el tipo de ejercicio a seleccionar y la programación e intensidad de este. El sobrepeso no solo es un factor de riesgo cardiovascular, sino también produce sobrecarga sobre los distintos tejidos del sistema musculoesquelético, articulaciones, tendones y ligamentos que se ven fuertemente demandados más allá de sus rangos fisiológicos.
El éxito de todo programa de ejercicio es lograr la adhesión para disfrutar de los beneficios de una vida más sana.
Luis Alberto Parada
Académico de Pedagogía en Educación Física
Universidad San Sebastián